Quito, 7 dic (EFECOM).- La Asamblea Nacional (Parlamento) de Ecuador, retomará la próxima semana el juicio político de censura contra la exministra de Energía y Minas Andrea Arrobo, quien el pasado miércoles no acudió al Legislativo luego de haber dicho en una carta que teme represalias del Gobierno si presenta pruebas de que no fue parte de un boicot para provocar apagones en la semana previa al referéndum celebrado en abril, como sostiene el Ejecutivo ecuatoriano.
Una fuente del Legislativo confirmó este sábado a EFE que el juicio político contra Arrobo consta en el orden del día del próximo 13 de diciembre.
El pasado 4 de diciembre, la presidenta del Parlamento, Viviana Veloz, suspendió el juicio político poco después de comprobar la ausencia de la exfuncionaria en la sesión del Parlamento, donde se leyó la carta publicada por Arrobo la víspera en redes sociales, en la que dijo que teme «represalias devastadoras» desde el Gobierno del presidente Daniel Noboa si en el juicio político ella presenta las pruebas de que no fue parte del presunto boicot.
«Entendemos, también hemos atravesado por procesos de hostigamiento y persecución. Lo que la exministra expone es grave; informa al país que hay chats entre ella y el presidente Noboa, donde se informaba y alertaba de la crisis en materia energética y, según la exministra, se le habría solicitado que no hable de ello porque podría afectar a la consulta popular», afirmó entonces Veloz.
La asambleísta correísta, que ahora preside el Parlamento, avanzó que ofrecerán a la exministra «las garantías para entregar elementos probatorios», que darían cuenta de la posible negligencia por parte del gobernante en la crisis energética.
«Jamás oculté información. De hecho, la entregué toda. Pero una crisis hídrica no era rentable para la consulta popular de abril de este año y me callaron. Por eso guardé todas las pruebas, para defenderme judicialmente», señaló Arrobo en la carta que publicó el martes pasado.
Desde finales de 2023, Ecuador ha vivido una serie de periodos de racionamientos de electricidad causados, principalmente, por la incapacidad de generar la suficiente energía para atender la demanda nacional en momentos de sequía en sus principales centrales hidroeléctricas.
Uno de estos periodos se dio en abril de 2024, cuando el Gobierno se vio obligado a realizar apagones con muy pocas horas de aviso al llegar el embalse de Mazar, el segundo más grande del país, a un nivel crítico, lo que llevó a la administración de Noboa a hablar de un boicot en su contra para perjudicar el resultado del referéndum, en el que buscaba sacar adelante reformas para fortalecer la lucha contra el crimen organizado.
Arrobo insistió en su misiva que ella fue quien trasladó personalmente a Noboa la necesidad inminente de iniciar apagones y señaló que la administración del mandatario le impidió hacer una rueda de prensa para explicar la situación a nivel nacional.
«Si la ciudadanía se da cuenta de que me prohibieron hablar y hasta me cancelaron la rueda de prensa que preparé, entonces mi vida y la de mi familia habrá acabado», alertó Arrobo.
«Defenderme con pruebas, en la Asamblea, significaría que la Fiscalía, que mantiene una estrecha e inseparable relación con el poder Ejecutivo, como venganza, me acuse sin pruebas», añadió quien en la Fiscalía ya enfrenta actualmente una investigación por presunta paralización de servicio público y traición a la patria, a partir de la denuncia emprendida desde el Gobierno. EFECOM