Un año sin volver a casa es lo que lleva Tatiana Ruiz. Este viernes «festejó» sus 31 años en la clínica Fleni, de Escobar. Sus papás y su hermana Camila son los incondicionales, los que nunca la dejaron de lado. No quieren saber nada con Lucas Feijoo (28), responsable de lo que le pasó a «Tati» la madrugada del 16 de diciembre de 2023, cuando discutió con ella, le trabó las puertas de la camioneta para que no se subiera y la arrastró varios metros, en Flores.
La víctima sufrió derrame cerebral, hematoma subdural, neumotórax izquierdo, politraumatismos y raspones, como también fractura de un codo, de cadera y del hombro. Estuvo en coma farmacológico en el Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento (IADT), de donde recibió el alta tres meses más tarde, el 22 de marzo.
Desde entonces está haciendo la rehabilitación en el Fleni de Escobar, debido a los daños neurológicos que padeció.
«Día a día está mejorando, pero es un cuadro complicado. Tiene la sonda nasogástrica para alimentarse y traqueotomía. La están haciendo caminar, no puede hablar, se comunica con señas, pero lo bueno es que te reconoce», cuenta Ricardo Ruiz (58), papá de Tatiana, quien era la mano derecha en su inmobiliaria, en Floresta.
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La familia aportó nuevas imágenes de las cámaras de seguridad que prueban que el conductor vio a Tatiana Ruiz cuando arrancó pero igual habría acelerado. Ocurrió en Yerbal al 2600, en el barrio de Flores. La joven sigue internada y no ha despertado. Lucas Feijoo tiene prisión domiciliaria. Piden que lo acusen por tentativa de homicidio.
Camila (29) es quien se ocupa de la tareas de su hermana, tras dejar su trabajo en una escribanía. Fue ella quien recibió aquel llamado de Lucas que todavía no puede olvidar: «Se murió Tati«.
Lo que más la indigna es la actitud que tuvo el joven, dueño de una casa de venta de equipos de audio e insonorización de automotores en Mataderos, apenas ocurrido el hecho y también a lo largo de este año.
«Ella está sufriendo, metiendo el cuerpo y todo lo que tiene para salir adelante, y él, de joda desde el día uno«, asegura.
Según el papá de Tatiana, Lucas, que permanece con arresto domiciliario y monitoreado con una tobillera electrónica, «está en su casa, con su familia, jugando a la Play, con billar, con un simulador de F1».
Camila agrega que «se lo pasan haciendo reuniones, con alcohol, festejando los cumpleaños de los amigos».
También les molestó la actitud de los padres del imputado, que hace poco viajaron a la India y subieron fotos a Instagram. «Si te vas, no lo publiqués en las redes. Nosotros estamos todos separados, arreglándonos para estar las 24 horas con Tati, es ridículo lo que están haciendo», advierte el papá.
Feijoo, que en su bio de Instagram fijó la frase «todo vuelve«, está imputado por «lesiones graves culposas agravadas por la conducción imprudente«, aunque la familia de la víctima insiste en que deberían agravar la acusación porque considerar que hubo «violencia de género y abandono de persona«.
«Tati no sabe nada de lo que le pasó, no se acuerda, no le podemos decir nada, pero cuando ella se expresa dice: ‘El que me hizo esto hay que matarlo‘», cuenta Ricardo, hermano del periodista de automovilismo Eduardo Ruiz.
«Él la atropella, se va, dice que Tatiana se olvidó la carterita, por eso vuelve vuelve a los ocho minutos, pero cuando lo hace la da vuelta a mi hija, la gira, la levanta y la tira otra vez. Entonces yo no sé si ese golpe otra vez le rompió más el tema del derrame y todo eso», especula el hombre, quien no deja de acompañar a su hija junto a su esposa, Gabriela Fernández (55).
Por su parte, Camila sostiene que los testigos del hecho, que quedó registrado por las cámaras de seguridad, le advirtieron a Feijoo: «Dejaste tirada a tu novia«, por lo que él se enojó.
La fatídica madrugada en Flores
La noche del 15 de diciembre, la pareja celebró el cumpleaños de Tatiana en la casa de los padres de Lucas, en Villa Luro. De allí, ya de madrugada, se dirigieron a un departamento de la calle Yerbal al 2600, en Flores, donde seguirían el festejo con amigos.
Hubo una discusión, Tatiana se bajó de la Ford Ranger y luego quiso subirse otra vez. Manoteó el picaporte cuando Lucas arrancó a toda velocidad y la arrastró varios metros. Eran las 4.
«En la casa de los padres de él, me cruzó y me dijo: ‘No la aguanto más a tu hermana‘», reconstruye Camila, quien en un posteo en Facebook cruzó fuertemente al imputado y su familia. «Somos nosotros los malos y ellos unas pobres víctimas que se juntan con fiestas desde el día uno«, escribió.
Feijoo es defendido por el abogado Christian Saragusti, quien también ha hecho sus posteos en Instagram. En uno de ellos, aseguró que «lo que realmente pasó fue un accidente«.
En otro, subió una foto junto al sonriente acusado, celebrando su arresto domiciliario, con el mensaje: «Cambiamos la calificación legal a lesiones y se va a casa«. Algo que, un año después, todavía no pudo hacer la víctima, cuyo nuevo hogar es, forzosamente, una clínica.
EMJ