Augusto señaló que la baja temporal de retenciones a las exportaciones agropecuarias tiene como objetivo la liquidación de granos y sumar reservas a través de un incentivo de alícuotas más bajas para los principales productos exportados por el sector. Y apuntó que en el “mercado interno no nos va a influir mucho, prácticamente no va a influir nada”.
“Siempre que se bajan impuestos son medidas buenísimas porque muy pocas veces sucede y es una medida loable de resaltar, que se tomó bueno en base a las economías regionales”, expresó. En cuanto al impacto de la medida en el sector ganadero explicó que el “maíz y el sorbo es lo que se ocupa para darle comer a los animales, donde se dio una baja de un 6%, pero es muy relativo porque aumenta el animal y la carne sigue estando igual”, planteó.
Si bien reafirmó que la “baja de impuestos es importante”, sostuvo que se deberían “mucho más impuestos porque es una guerra entre el empresario y comerciantes contra la gente, la gente muchas veces no sabe la cantidad de impuestos que tiene que llevar un empresario sobre su espalda, es muy complicado”.
En cuanto a la situación del mercado local, aseguró que “enero fue un mes muy tranquilo, la gente salió bastante de vacaciones”. “Hay que innovar, hay que pelearla como siempre, hay que estar al frente y ser muy eficaz en el trabajo de manejar un negocio o una empresa”, indicó.
“Ojalá que sigan sacando impuestos entonces la carne llegaría más barata a la gente y nuestros trabajadores estarían más contentos porque en definitiva el que termina pagando todos los impuestos es el consumidor”, opinó y reiteró que esta baja no influirá en el costo final de la carne.
Sin embargo, Augusto afirmó que en la “parte regional no tendría por qué aumentar la carne ni tampoco van a bajar los precios, puede llegar a subir si llega a faltar ternero, pero hasta ahora viene bien la safra”.