“Lo que se viene es la clásica locomotora de media mañana de Todo Noticias, con toda la información en vivo, pero con más secciones y apuestas a conocer logros y necesidades en cada punto del país. Vamos a hacer un programa todo terreno, donde recorramos haciendo running, piloteando aviones o buceando en cada punto dónde exista una historia para contar. Pero además vamos a buscar en archivos policiales, a contar las buenas noticias del día y alimentarnos de todas esas miradas de nuestra Argentina que valen la pena. Será un recorrido sin buscadores y algoritmos, pero con mucho olfato periodístico”, cuenta Guillermo Lobo en charla con Clarín.
Para Guillermo Lobo es fundamental que el periodismo “no se aleje de las fuentes” y “vuelva a las historias de las personas reales, lejos de los dispositivos y cerca de las miradas” Y ejemplifica: “Por eso no hacemos un informe de la Antártida, hacemos un informe desde la Antártida”, dice sobre TN de 10 a 13, que comenzará su nueva temporada este lunes 3 de marzo.
Lobo es de esos comunicadores que prefieren vivir el mundo más que solo contarlo. De esos que prefieren el café que apenas su aroma. En el camino de estas tres décadas con las noticias (tiene 55 y hace 31 que está en TN) se recibió de buzo, piloto de avión y chofer de pasajeros profesional. “De hecho al primer programa voy a entrar al estudio manejando un colectivo de 1971, con mi compañera Lorena Maciel a mi lado”, adelanta.
Sobre este punto, desmenuza: “Vamos tomando cosas de nuestros entrevistados, es inevitable. De las vidas que vamos contando, y sus pasiones. Yo me inspiro mucho en cuando era chico y veía a Jacques Cousteau. Y él decía que un explorador, y en cierto modo a veces los periodistas somos exploradores, tenía que comprobar las cosas por el mismo, ir a las fuentes. Y hoy en la era digital sigue siendo apasionante ir a la fuente, ir al fondo del mar o a 3.000 metros de altura, o bucear en las profundidades o conocer una ciudad corriendo o manejando un colectivo”.
Una pareja que se entiende con una mirada
El tándem Maciel-Lobo lleva ya 15 años al aire y en un horario medular de la televisión por cable argentina acompañaron acontecimientos centrales en la vida del país. Cuando se le pide recordar los principales, detalla: “Recuerdo la muerte de Néstor Kirchner, lo que sería el crimen de Nisman, el caso Loan. También tuvimos bellas coberturas como una de las primeras entrevistas a Franco Colapinto (un logro de Gustavo Baabour) y todas las buenas noticias del día que son pilares en nuestro noticiero”.
Sobre su compañera de conducción acentúa: “Sin Lorena nada de esto sería posible. No solo es una periodista formidable, en el aire es mi compañera y mi cómplice. Ya nos entendemos con solo una mirada, luego de 15 años de trabajar juntos cinco horas diarias existe una conexión única sin la cual yo simplemente no podría estar”.
Para esta nueva temporada se preparan nuevas secciones como “La buena noticia del día” (la épica de los que estudian y trabajan y construyen un país mejor),“Argentina a fondo”(que busca conocer otra dimensión del país desde sus riquezas marítimas, hasta ciudades sumergidas), “El archivo de Lore”(casos policiales que quedaron sin resolver y expedientes abiertos que buscan Justicia) y “Con bienestar”(con la Salud y el ambiente como prioridades).
El equipo lo completan: En política: Adrián Ventura, en Deportes; Gustavo Baabour, en Tiempo; Matías Bertolotti, Espectáculos; Alejandra Peralta, Transito; y Day Lomardi y Flor Ferrero, en los móviles.
Si bien refuerza la idea de que “mantener la pasión en periodismo es una construcción diaria”, aclara que “tampoco sería posible sin Carlos De Elía como mentor y faro; y actualmente con Ricardo Ravanelli desde la Dirección de Noticias, que forjaron esa apuesta en el periodismo sólido y de excelencia como valor de la señal”.
Mil vidas en una vida
Para Lobo, pareciera no ser solo la presentación de un nuevo año de trabajo, sino una declaración de principios “Proponemos salir de los buscadores y volver a encontrarnos con los protagonistas, con las personas. No movernos a través de un click, sino de la empatía y el humanismo”, define.
El periodista jujeño dice que le “preocupa” cuando encuentra “contenidos que sólo buscan ser virales sin ninguna profundidad”. “Me alarma cuando veo a doctores haciendo sólo pasos de baile o a artefactos que buscan hacer patrones rítmicos para pegarse en el cerebro 15 minutos. En la era de la “IA” nosotros ofrecemos otra IA: LA Identidad Afectiva y el cariño mutuo”.
Y completa: “Luego de tantos años, aprendí que hay nortes que no se pueden perder. Si mis zapatos están demasiado lustrados, hay algo que estoy haciendo mal. Si huelo demasiado a perfume es que estoy lejos de los barrios, de la gente, de la calle; y ahí es cuando tengo que volver”.
Su entusiasmo se nota. Su voz se expande con cada nota que imagina o diagrama en el aire. Como quien lleva al plano del pensamiento lo que no puede esperar a ver en la realidad. Asegura que no le pesa la “rutina” y que en esta profesión le enseñaron a tener “la piel tan dura como el elefante, para poder soportar los golpes, pero tan fina como la del bebé para no perder sensibilidad”.
“Si me preguntan porque nunca se me hizo rutinario mi trabajo es porque creo que nunca dejé la edad de los ‘¿Por qué?’. Siempre aparece una nueva pregunta, una nueva duda, un nuevo misterio. Siempre hay una mirada del mundo que no me quiero perder y quiero entender. Mientras esa llama siga intacta, seguiré volviendo cada día al canal con el entusiasmo del primer día”, cierra Lobo.