El reciente anuncio del gobierno de Javier Milei sobre la eliminación de la jubilación de privilegio de Cristina Kirchner ha generado un gran revuelo en el ámbito político y social de Argentina. Esta medida, que también incluye la anulación de la pensión derivada de su difunto esposo, Néstor Kirchner, es parte de una serie de acciones destinadas a revisar y, en algunos casos, eliminar las asignaciones especiales otorgadas a ex presidentes y vicepresidentes.
La decisión de dar de baja la jubilación de privilegio de Cristina Kirchner se basa en su condena por corrupción, un hecho que el gobierno de Milei considera incompatible con el beneficio de una pensión especial.
Según el vocero presidencial, Manuel Adorni, esta medida representa un ahorro significativo para el Estado, estimado en unos 21.827.624 pesos. La eliminación de estas pensiones se enmarca en una política más amplia de austeridad y transparencia que el gobierno busca implementar.
El gobierno ha anunciado que revisará entre 13 y 15 casos adicionales de jubilaciones de privilegio otorgadas a otros ex presidentes y vicepresidentes. Aunque no se han dado detalles específicos sobre los nombres de los beneficiarios que serán revisados, se ha confirmado que el caso de Carlos Menem no será incluido en esta revisión.
La razón principal es que Menem ya no está vivo, y su pensión es cobrada por su esposa, Zulema Yoma. La exclusión del caso de Carlos Menem ha generado controversia y críticas. Algunos argumentan que, al igual que Cristina Kirchner, Menem también tuvo condenas por corrupción, y por lo tanto, su pensión debería ser revisada.
Sin embargo, el gobierno ha defendido su decisión, afirmando que la situación de Menem es diferente porque su esposa es la beneficiaria de la pensión. Además, Javier Milei ha expresado públicamente su admiración por Menem, a quien considera «el mejor presidente de los últimos 40 años».
Reacciones
La medida ha provocado una serie de reacciones en el ámbito político. Los seguidores de Cristina Kirchner han denunciado la decisión como una persecución política y un intento de deslegitimar su legado. Por otro lado, los partidarios del gobierno de Milei han aplaudido la medida como un paso necesario hacia la transparencia y la justicia.
Zulemita Menem, hija del ex presidente Carlos Menem, también ha salido a defender la pensión de su padre, argumentando que las causas penales en su contra no tenían una sentencia firme al momento de su fallecimiento. Esta defensa ha añadido un nuevo capítulo a la ya compleja discusión sobre las jubilaciones de privilegio en Argentina.
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