El comité Nobel conversó por primera vez con la iraní Narges Mohammadi, la ganadora del premio de la paz de 2023 quien se encuentra temporalmente excarcelada por razones médicas, según un video divulgado la noche de este domingo por la organización.
“Hoy, 8 de diciembre de 2024, el Comité Noruego del Nobel se ha puesto en contacto directo por primera vez con Narges Mohammadi, laureada con el Premio Nobel de la Paz 2023″, anunció el organismo a través de su perfil en redes sociales, donde ha compartido un extracto del encuentro realizado por videollamada.
“Hace apenas unos días, Mohammadi fue liberada temporalmente de la conocida prisión de Evin para recibir tratamiento médico, permiso limitado a solo 21 días. Mohammadi ha pasado diez años de su vida entre rejas y ha sido condenada a un total de más de 36 años de prisión. (…) Dentro de 17 días volverá a la cárcel”, agregó la organización.
Mohammadi relató cómo el sector de mujeres de la prisión de Evin, en Teherán, “estalló en cantos” de la consigna de protesta “mujer, vida, libertad” en lengua kurda cuando escucharon que había sido premiada, según las imágenes difundidas por el comité Nobel en redes sociales.
“Una de mis compañeras presas logró llamar a su esposo que también está encarcelado en el ala masculina. Por ellos supimos la noticia increíble, yo había ganado el Premio Nobel de la Paz”, contó Mohammadi al comité, vestida de verde y con el cabello descubierto.
El comité recordó en su comunicado que la activista recibió el año pasado el mencionado premio por su “incansable lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y su inquebrantable defensa de los Derechos Humanos y la libertad”.
A lo largo de toda su vida, la activista ha fundado asociaciones en defensa de los derechos de las mujeres y escrito libros y artículos para denunciar los abusos a los que son sometidas por las fuerzas de seguridad y las autoridades, en particular en las cárceles del país.
La activista de 52 años está detenida desde noviembre de 2021 por varias condenas debidas a sus campañas contra el uso obligatorio del hiyab y la pena de muerte en Irán.
Fue excarcelada la semana pasada por motivos de salud tras ser sometida a una cirugía ósea.
Los seguidores de Mohammadi y la ONU exigen que sea liberada de forma incondicional y permanente.
Los dos hijos de Mohammadi recogieron el premio, que se le otorgó en reconocimiento a su campaña por los derechos humanos en Irán.
Su hijo Ali, que pudo hablar con ella brevemente a comienzos de mes, afirmó que su madre va a utilizar este tiempo para seguir denunciando la situación de los derechos humanos en Irán.
Taghi Rahmani, el marido de la premio Nobel de la Paz iraní, que intervino por videoconferencia desde México, insistió por su parte en que durante la conversación que tuvo con ella pudo comprobar que tenía un buen estado de ánimo y que se mostraba “combativa”.
Rahmani hizo hincapié en que este permiso “no es ninguna señal de clemencia” de las autoridades iraníes con su mujer, sino que se explica por su estado de salud, que se había deteriorado hasta el punto de que “no había otra alternativa”.
Explicó que estos 21 días son “ampliamente insuficientes” teniendo en cuenta que los médicos que le operaron hace unas semanas de un tumor en la pierna presentado como canceroso habían establecido que el periodo de recuperación debía durar al menos tres meses.
(Con información de EFE, Europa Press y AFP)